Brandon Flowers

Desde hace unos meses quería hablar sobre The Killers y su cantante, Brandon Flowers y he preferido hacer una especie de pack hablando del grupo y su canción Human, para luego (o antes) centrarme en este tipo tan peculiar.

Ésta es su imagen cuando irrumpió

Ésta de sus inicios

En cada foto sale distinto, pero ese camaleonismo va más allá de un cambio de look o de una declaración de fan a Bowie.

Brandon Flowers no es guapo a primera vista, ni al segundo vistazo. Es el juego de expresiones con el que parece divertirse. En cada aparición el objetivo lo atrapa antes de que este aún-no-treinteañero (el resto le llevan como yo 5 años) nos engatuse con sus ojos y su sonrisa. No recuerdo en el panorama de celebridades a un tipo con más impostura y que la explote con tanta naturalidad. Es un tipo que lo ves trabajando de botones (como así era) y lo ves monillo pero que en el escenario y ante las cámaras sabe desplegar ese juego de artificio bastante creíble (ahí está la clave) que se basa además en la ambigüedad.



Porque una vez que lo vemos, nos interesamos y descubrimos que, efectivamente nació en Nevada, el desierto ilumiando de neón donde se formó la banda, pero que pasó toda su infancia en Utah con su familia. perteneciente a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Es mormón, sí. Y se declara como tal.

Lo que no le impide beber como un cosaco, fumar como un carretero y follar como un..., bueno esperemos supongamos que no sea un malfo. Tampoco le importa maquillarse y Brandon usa más eye liner que ésta que suscribe.

Las letras de varias canciones como Andy, You're a star, se recrean en mensajes homófilos que vete tú a saber qué interpretación le dan. Él mismo quiso negar con rotundidad que fuera homosexual. Se ha casado con una joven desconocida y han tenido un hijo. Osea, es un gayetero de toda la vida.

Con su nombre, estos cuatro chicos preteden ir de malotes. Pero hasta ahora no han dado ni un pequeño escándalo, se encierran en el estudio, han publicado cutro discos en seis años y lamentan la cancelación de sus conciertos para no defraudar a sus fans. Por cierto Brandon padece de sinusitis crónica que es lo que les impidió parecer por España. En el fondo son unos buenazos, estos chicos, aunque tengan pintas que ninguna suegra aprobaría para un yerno.

El estilo de Brandon es netamente country pero sabe combinar con prendas que sólo a él le sentarían bien. No destaca por usar joyas, creo que no tiene ni piercing, pero su fondo de armario de actuaciones rebosa de chaquetas a cuál más chic. Se ha quitado la perilla que lucía con el lacito negro.

Y la ropa formal no parece rehuir de él.

Brandon rezuma carisma, con la misma intensidad con que se un esquimal sudaría en Nevada, por todos sus poros. Sin duda, el grupo siempre queda ensombrecido a su lado.

Encandila con su atractivo, nos mira con aire de incredulidad pero su ego se desborda igual que el morbo que tiene. Es su morbo y punto. Brandon tiene un morbazo (pronunciese la primera -o- como si potaras) de quitarnos el sentido.

No es el primero, no es original, no es un bellezón, pero sabe estar ahí. Es sexy y es el frontman del momento. Y mientras, le disfrutamos.

kill me with flowers